Entrevista sobre los Comecarne con el equipo de ´Eavy Metal

Si ayer nos trajeron información sobre el diseño de las Cortes Comecarne, hoy toca hablar con Max, el líder de ‘Eavy Metal, sobre cómo él y su equipo abordaron la pintura de los nuevos Comecarne.

Para Max, el primer desafío fue el hecho de que los Comecarne partían de ser un subconjunto dentro de los Condes Vampiro en Warhammer Fantasy. Incluso los Seraphon son una facción desarrollada, con unidades bien diferencias entre sí y con subfacciones con sus propios esquemas de colores diferentes.  Ahora con Age of Sigmar esto cambia, y toca dotar de personalidad y variedad a los Comecarne.

Cada una de las diferentes facciones de Muerte tiene su propio tipo de identidad visual: la magia fantasmal y los colores verde azulado de las Noctánimas; los esqueletos, zombis y murciélagos desiguales pero de diseño «realista» que crea la mezcla heterogénea sobrenatural de los Necroseñores Pudrealma y los Osiarcas que son homogéneos, estrictos y uniformes. Y en el caso de los Comecarne, son el rostro salvaje, bárbaro y empapado de sangre de Muerte, coloreado con una paleta de piel enfermiza y de aspecto asqueroso.

Para Max, algo indispensable era lograr plasmar el hecho de que estas bestias eran humanos que ahora se han convertido en algo más, algo que no está del todo vivo ni muerto. Eso aporta un elemento de horror a la gama, pero de una manera diferente al resto de monstruos de Muerte, porque aquí podemos ver cierto atisbo de humanidad, y de una manera trágica además.

Así que la pregunta obvia para Max era: «¿Cómo representamos a los humanos de los Reinos Mortales que han caído bajo esta maldición? ¿Cómo los afectaría?» El equipo de ´Eavy Metal no quería caer en lo básico de: «Oh, la maldición te hace rojo, o azul, o extraño y pálido». Pasaron mucho tiempo examinando tonos de piel y tratando tener presente en todo el proceso que lo que estaban pintando fue alguna vez humano.

Tampoco querían limitarse a tener una receta única para la facción. En un ejército de Marines Espaciales, los capellanes y apotecarios dan cierta variación a la hora de pintar, así que intentaron seguir el mismo concepto con los Comecarne. Básicamente, toda la gama de miniaturas es solo piel, así que tuvieron que centrarse en obtener variaciones.

 

Max nos destaca que querían asegurarse de que los Reyes Necrófagos Abominables, como los vampiros, parecieran desangrados y más pálidos en contraste con los necrófagos, que tienen más tonalidad rosada alrededor de los codos y rodillas; sugiriendo que están mucho más cerca de ser humanos, aun siendo lo que son.

Los Fustigabestias Reales (la banda de Warcry) se completaron muy al principio del proyecto, y les ayudaron a definir los colores centrales y los procesos que usaron para representar los diferentes materiales, además de permitirles establecer algunos límites con algunos tonos de piel más extremos.

Cada una de sus cuatro subfacciones necesitaba tener algo único e interesante. Los Pielampollada, por ejemplo, adoran al sol, lo que significa que su piel pálida y enfermiza tiene áreas donde está extremadamente quemada y dolorida.

El equipo rápidamente decidió representar a los Necrófagos tal cual los veríamos sin estar sumidos en su maldición. Antes de que la ilusión afecte al enemigo, no ven banderas coloridas ni heráldica detallada; todo lo que ven son entrañas y harapos ensangrentados.

Las banderas de los Guardia de la Cripta y los escudos de los Caballeros Morbheg tienen parodias de nobleza hechas de carne, hueso y sangre. Pintaron marcas y diferentes tonos de piel en la piel desollada y desmembrada de una manera que recuerda a la heráldica tradicional. A partir de esto, puedes imaginar lo que ve el necrófago: en lugar de manos clavadas en un tablero cubierto de salpicaduras de sangre, es la heráldica intrincada de su duque.

Siguieron este principio con el Gran Juez Gormayne, hay textos normales escritos en las páginas del libro que está sosteniendo, pero están muy desvanecidos, y hay marcas encima que son simplemente garabatos sangrientos. Para él, estos probablemente sean enmiendas y notas a pie de página cruciales, pero en la miniatura, tiene que representar lo que realmente es: los garabatos de un caníbal delirante.

Un error que trataron de no cometer fue tratar la piel como si fuera un uniforme. Puede haber variaciones sutiles entre las cortes de diferentes Archiregentes o diferencias entre cortes a lo largo de los Reinos Mortales, pero en general debería ser la misma maldición y debería tener un efecto unificado. Representar materiales de manera diferente puede agregar tanta identidad como elegir un color, lo que significa que los Cartilagosangrieto podrían optar por untarse con marcas, mientras que los Montehueco podría salpicar su cabello y pelaje con sangre. Es una diferencia sutil, pero agrega identidad más allá del simple color de piel.

Para Max, la piel desollada y la sangre ofrecen oportunidades sorprendentes para representar diferentes materiales. Puedes observar la carne y los órganos, y pensar en sus propiedades; esta pieza está seca, esta está fresca, esta está podrida… lo que aporta una variedad de texturas. La peluca de intestinos de Goremayne es un buen ejemplo, ya que se representa extremadamente húmeda, con reflejos blancos puros que transmiten la naturaleza brillante de estas entrañas frescas. Incluso con la sangre, hay mucha variedad en los tonos, desde la sangre seca de color marrón oscuro que vemos en las miniaturas hasta cosas que son vívidas y frescas, como en el bastón del Cardenal, que presenta el corazón recién y aún sangriento arrancado de un vampiro.

También hay muchos otros elementos diferentes que rompen la abrumadora abundancia de piel, como es el caso del hueso: desde hueso blanqueado hasta untado de médula, pero también hay armaduras oxidadas y telas sucias. Con el Decapitador Real, tuvieron el desafío de hacer que los metales se vean desgastados y oxidados pero aún así destaquen contra el cuero marrón, lo consiguieron haciendo que el filo de la cuchilla fuese muy brillante, como si la hubiera estado afilando a pesar de su estado deteriorado.

Max nos da la clave de que a la hora de pintar la piel humana tenemos referencias, tenemos con qué compararla, así que es fácil equivocarse al pintarla. Sin embargo con la piel de un orco o un Necrófago no, no podemos reprocharnos que no nos haya quedado «realista».

Y Max acaba dándonos algún truquillo de pintura:

Las características musculosas y demacradas de estas miniaturas se llevan muy bien con las pinturas Contrast y las Shades. Nos recomienda una imprimación cenital (spray oscuro como imprimación y otro más claro por encima), y al aplicar Contrast encima, conseguimos resultados chulos rápidamente. Además, estos tipos siempre están completamente cubiertos de sangre, lo que da la oportunidad de quedarnos agusto con la pintura Blood for the Blood God, ¡lo cual siempre es divertido!

Tampoco hay ninguna pintura a mano alzada o filigrana fina en ninguna parte de estas miniaturas. Se pueden pintar las banderas y el metal sucio sin preocuparnos demasiado porque quede fino o limpio.

 

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