La ciudad de Marrowbone marcha a la guerra

Gracias a Games Workshop hemos podido disfrutar del Army Set de la renovación de Ciudades de Sigmar antes de tiempo. El honor en esta ocasión ha recaído en mí («Nyara al habla»), así que acompañadme a descubrir la Ciudad de Marrowbone. 

 

 

Empezamos por el principio: ¿Cómo he escogido el esquema? 

Incluso en el propio Battletome, en el cuál nos dan muchas pistas y consejos para escoger nuestro propio esquema, insisten mucho en la idea de que las Ciudades honran a los Forjados que han ayudado a asentarlas y defenderlas. Algunos de por aquí ya conoceréis a mis «Archangels of Marrowbone» (para muestra un botón, ejemplo un poquito más abajo). Principalmente son blancos con toques rosa/magenta, así que tenia que pensar en cómo iban a quedar desplegados codo con codo, que se viesen cohesionados pero no mezclados.

 

Esceno prepintada de Bandua, por cierto.

 

Tenía claro que:

1.– Los escudos iban a ser blancos.

2.- La armadura de metal oscuro.

3.- Eliminar el azul como color auxiliar, para no quitarles protagonismo ni personalidad a los Forjados.

4.- Las peanas iban a ser iguales a las de los forjados.

Tened en cuenta que lo que más va a verse del ejército son los escudos. Solo tenéis que fijaros en las imágenes oficiales del ejército desplegado, lo primero que llama la atención es el rojo de los escudos.

Lo siguiente era escoger el color propio del ejercito.  A medida que los he ido montando, las filigranas, el fuerte afán religioso, el concepto de «procesión» (vinculado además a la muerte), la estética general, etc…, todo me recordaba muy poderosamente a los Nazarenos («Seguro que Blasphemous algo tiene que ver también»).  Así que color general escogido: Púrpura Nazareno con filigranas doradas.

 

Mariscal del Gremio Libre

Buena suerte tomando decisiones, tiene nada más y nada menos que 6 opciones de montaje.

Ha sido la miniatura en la que he probado el esquema. Otra cosa que he tenido en cuenta es dar prioridad visual a los personajes. ¿Cómo? más dorado y púrpura que a las unidades de línea («no van a gastarse los dineros en teñirle la ropa al aldeano de turno»).

Transmutador de guerra

Al no ir tan cohesionado con el esquema general del ejército, me permitía empezar a pintar sin preocuparme en pensar en cómo iba a quedar en conjunto con el resto de miniaturas. He optado por un delantal oscuro, quería que lo único que destacase fuese la magia de forja.

 

 

Adalides del Gremio Libre

Los he disfrutado un montón, son la versión 4K UHD de las órdenes de caballería del antiguo Fantasy. Las bardas, la decoración de los yelmos… Y en su época (Nyara de 10 añitos) fue lo que más me gustó pintar.

En honor a ello el pequeño guiño del esquema (Blazing Suns). Es de agradecer que hasta trasfondísticamente han reforzado la idea de que cada caballero tiene una procedencia distinta, dando pie a montar y pintar cada uno con un esquema completamente independiente («pienso meterles mucho cariño a cada uno»).

 

Yelmoférreos del Gremio Libre

Cuero, tela, gambesones, pantalones, botas… no todo es armadura en esta vida, y hay que escoger tonos neutros en las partes «menos importantes» de las miniaturas para no emborronar el esquema. Los comodines suelen ser marrones, caquis, negros o grises. De nuevo he querido destacar al campeón de la unidad con algo más de dorado que al resto.

 

Y todo esto en 4 días («socorro»).

He priorizado pintar menos cantidad pero a una calidad media, que pintar más miniaturas y que al ver las fotos se nos caigan los ojos (que el zoom es muy traicionero). Estas semanas seguiré avanzando con lo que queda de caja ya un poco más tranquila (podréis ir viendo avances en mi Instagram).

Os agradecería un poco de feedback: ¿Os gusta el formato «Blog personal»? ¿Os gustarían más posts centrados en pintura? ¿Showcase de nuestros ejércitos? ¿Ver los progresos por aquí?

(y sí, más Podcast, lo sabemos).

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