Informe de batalla en estilo clásico: Ogor Mawtribes vs Ossiarch Bonereapers
Hoy inauguramos un nuevo tipo de contenido en La Voz de Sigmar: los informes de batalla al estilo clásico, de los que devorábamos hace muchos años en las páginas de antiguas White Dwarf. Si os gusta, os pedimos el favor de compartirlo entre vuestros conocidos y compañeros de hobby.
Orpheon Katakros, Mortarca de la Necrópolis, contemplaba la explanada por la que sus Osiarcas avanzaban de manera implacable. Había analizado incontables posibilidades estratégicas en esta pequeña etapa de su gran plan de conquista de Ochopartes. ¿Acaso esos brutos ogors creían de verdad ser rivales de su inefable genialidad táctica? Por supuesto que no, pero en su simpleza caerían en la trampa preparada por el Mortarca y por Arkhan el Negro.
La mayor parte de sus legiones habían sido enviadas hacia el sur, amenazando las montañas de las molestas tribus. Y eso dejaba desprotegidos a los dos líderes. ¿Y cómo iban a dejar pasar una oportunidad así los brutos ogors para intentar descabezar a su enemigo? No lo iban a dejar pasar. Acudirían al lugar en el que Katakros tenía ya todo planeado para vencer. Pobres. No eran más que brutos. Cuando cayera su Frostlord y el resto de su séquito en esta batalla, los que estarían decapitados serían los ogors, y la campaña sería un paseo por el campo.
Cuando Hrotgut Earltrapper tenía hambre, sus tripas rugían con el sonido de una avalancha, y su mirada se tornaba más roja que la sangre de los calderos. Y el problema de su hambre estaba muy claro: esos malditos esqueletos estaban dominando los alrededores de sus montañas, y eso vaciaba de comida a su tribu. Hrotgut no había alcanzado su posición como Frostlord por casualidad. Tenía muy claras sus prioridades. En cuanto se enteró de que los líderes de los Osiarcas estaban desprotegidos cruzando el Paso de Sandhis, no lo pensó dos veces y bajó de las alturas a la llanura para terminar con todo esto. Su tribu no podía morirse de hambre, así que no temía a los famosos Mortarcas. Resopló el cuerno de guerra, y se lanzó a la carga.
Turno 1 Ogor
Las huestes del Frostlord toman el centro del campo de batalla, animados por el bonificador a Movimiento que les otorga su hambre. A nivel de magia y disparo apenas hay actividad aunque uno de los Mortek cae bajo la trampa de cadena de los Stonehorn Beastriders, pero en la carga el Frostlord consigue llegar al combate tras repetir su tirada. Los demás no le pueden seguir el ritmo, pero entre heridas mortales y combate casi consigue eliminar a la unidad de 20 Mortek… pero uno de ellos sobrevive, y eso es un grave problema para los Ogors.
Turno 1 Osiarca
Con un movimiento impío, los Necropolis Stalkers se acercan al Frostlord tras las maldiciones tiradas por Arkhan el Negro sobre él para que impacte peor. Pero lo dramático es que el solitario Mortek superviviente recibe 6 nuevos acompañantes, levantados por Katakros y Arkhan. La catapulta Mortek Crawler hace 5 daños al Butcher a distancia, mientras los Stalkers completan su carga contra el Frostlord.
En el combate, el bono de +1 Ataque otorgado por Katakros y algo de fortuna consiguen que el Frostlord caiga ya en este primer turno, tras hacer una única baja a la renacida Mortek Guard.
Turno 2 Osiarca
El destino (o posiblemente la cuidada planificación de Katakros de esta emboscada en la que han fingido estar desprotegidos para atraer al Frostlord) otorga a los Osiarcas un doble turno. Lo aprovechan ampliando su zona de influencia de forma lenta pero segura, aunque en el caso de los Necropolis Stalkers tienen claro que tras una carga exitosa el turno anterior, toca posicionarse para otra más tras rodear la pieza de escenografía prepintada estilo monolito de Bandua. Además, el obelisco Bonetithe le da un -1 a impactar a los Leadbelchers, mientras Katakros y Arkhan maldicen a los Stonehorn Beastriders y siguen levantando cada vez más Mortek Guard. Donde antes había un superviviente, ahora ya hay doce. El propio Arkhan se posiciona para dar apoyo en la zona donde puede concentrarse más combate en turnos posteriores.
La catapulta mete 10 heridas a los Mournfang de la zona central, pero su éxito se ve opacado por el doble 1 de los renacidos Mortek en su intento de carga a los Stonehorn Beastriders. Los que no fallan su carga son los Necropolis Stalkers, que entran en un combate donde también reciben bastante daño si bien logran su objetivo: reducir los efectivos de los Mournfang del objetivo de la derecha. En todo caso, aunque disputan el objetivo, no logran todavía controlarlo.
Turno 2 Ogor
Los vientos de magia gastromántica fluyen con potencia para ayudar a los Ogors tras haber perdido a su Frostlord, el bueno de Hrotgut Earltrapper. ¿Pero cuál era su plan? El Butcher lo tiene muy claro, y por eso se aplica al máximo. Por un lado, el caldero cura algunas heridas por distintas unidades. Por otro lado, el hechizo de Fauces Voraces se ceba sobre la unidad de Mortek Guard que está frente al Butcher.
Los Leadbelchers se posicionan para disparar, pero el penalizador que les impuso el obelisco Osiarca anteriormente les hace ser inútiles en esa tarea. Mientras, el Tirano no olvida el plan del Frostlord, y acude al objetivo de la izquierda. Los Frostsabres llegan por un flanco para intentar cargar contra Arkhan el Negro, pero no lo consiguen ni repitiendo. Los que sí cargan son los Leadbelchers, que acaban en combate con el último Mortek Guard que sobrevivió al apocalipsis de Fauces Voraces, y también a 4 más de la otra unidad a su lado. Peor suerte corren los Mournfang centrales, que apenas logran 3 bajas ante la unidades de Mortek Guard renacida tras aquel primer superviviente del primer turno y en respuesta sufren un duro castigo con dos bajas y otra más por moral, quedando la unidad completa eliminada. Al menos en el combate del objetivo de la derecha, los Necropolis Stalkers siguen sufriendo castigo y ya apenas queda uno que está en las últimas. Eso sí, los Ogors terminan el turno controlado ambos objetivos de la zona media y lo más importante: el objetivo de la zona Osiarca, gracias a los Leadbelchers por un poquito (en el diagrama parecen más alejados pero estaban ya controlando como en mesa se podía comprobar gracias a los marcadores de objetivo de Bandua Wargames).
Turno 3 Osiarca
El poder de alzamiento de muertos vuelve a rellenar las dos unidades de Mortek Guard, mientras la magia Osiarca va mermando a los Frostsabres recién llegados. La catapulta Mortek Crawler impacta a los Leadbelchers y el Gothizzar Havester sigue logra otra baja en disparo entre los felinos flanqueadores.
En el objetivo de la derecha, la pinza hecha por cargas de la infantería y de Arkhan el Negro termina por destruir toda presencia Ogor en la zona. Los Leadbelchers también pierden efectivos poco a poco en su combate.
Turno 3 Ogor
El Butcher quiere volver a desatar las Fauces Voraces sobre los Mortek frente al caldero, pero esta vez Arkhan el Negro lo dispersa, preocupado ante el poder gastromántico desatado el turno anterior. Sí que puede acabar con uno de los esqueletos gracias a un proyectil mágico antes de acudir a controlar el objetivo junto al caldero para dar el relevo al Tirano que se lanzó en ayuda de los Leadbelchers. No hace falta esa ayuda, porque los Ogors usan su disparo para matar a casi todos los Mortek Guard, y en combate destruyen a los que quedaban. Quienes no logran su carga fueron los Frostsabres, que querían llegar hasta la catapulta pero se quedan a medio camino.
Turno 4 Ogor
Y los dioses de los dobles turnos beneficiaron ahora a los Ogors, que disfrutan de la posibilidad de volver a actuar antes que sus rivales. Acuden a la catapulta con ganas de roer esos huesos, haciéndole muchas heridas entre disparos y la doble carga de Leadbelchers y Frostsabers.
Mientras tanto, el Tirano y el Butcher siguen al pie de la letra el plan del difunto Frostlord.
Turno 4 Osiarca
Katakros acude a destruir a los felinos, mientras magia y disparo se encargan de los Leadbelchers restantes. Los Osiarcas se dedican a controlar el campo de batalla casi al completo, y la Mortek Guard que tuvo un único superviviente el primer turno sigue creciendo en tamaño gracias al alzamiento de muertos.
Arkhan el Negro se lanza como un obús de muerte y ejecución contra el Tirano, que es destruido sin remedio. La batalla estaba resultando más larga de lo esperado, al tener que ir de un lado a otro para ir eliminando a estos brutos hambrientos, dispersos por el campo de batalla. ¿Había tenido esto en cuenta Katakros cuando la planteó?
Turno 5 Osiarca
Son ahora los Osiarcas quienes tienen la posibilidad de volver a actuar, y con un limpio catapultazo destruyen al Butcher, eliminando toda presencia Ogor de la mesa. Arkhan el Negro alcanza con presteza el objetivo entre el caldero, ya sin dueños, y el obelisco. Esta batalla ha durado más de lo debido. Gira su cabeza lentamente y encuentra en la lejanía la mirada impasible de Katakros. Los dos saben lo que ha pasado.
Orpheon Katakros, Mortarca de la Necrópolis, contemplaba la explanada en la que sus Osiarcas habían arrasado por completo a esos brutos ogors. Arkhan el Negro estaba tan decepcionado como él, y con razón. Ambos subestimaron a su enemigo. Estos descerebrados hambrientos y destructores no habían bajado de las montañas para intentar matar a los Mortarcas. No habían caído en su trampa. Estos brutos habían venido a entretenerlos todo el tiempo posible. Y cuando un enemigo se sacrifica para hacerte perder el tiempo, la razón es siempre la misma. En otro lugar, ese mismo enemigo está logrando una victoria mucho mayor. El genio bélico de Katakros no necesitaba que nadie le explicara lo que había pasado entre sus fuerzas principales, las que había apartado para intentar atraer a esta trampa a los ogors. Sin duda, sus legiones estaban siendo masacradas por el verdadero ataque de los hambrientos salvajes de las montañas. Y mientras tanto, él y Arkhan estaban aquí perdiendo el tiempo con un ataque de unos pocos desgraciados.
Sí. Esta vez Katakros había perdido. Pero ya tenía en mente decenas de formas de hacer pagar por ello a todos y cada uno de estos desgraciados…
Y para terminar este informe clásico de batalla, nos quedamos con las conclusiones de los dos generales al mando de los ejércitos de esta batalla jugada en Bandua Wargames: